Es una receta deliciosa que podemos acompañar con la guarnición que más nos apetezca por ejemplo con arroz basmati, patatas al vapor o un puré de patatas.
Las recetas con pollo siempre son un éxito, en cocido, alitas al ajillo, guisado de pollo, picantón especiado al tequila, a la naranja, en pepitoria, en escabeche, en croquetas, pollo marroquí al limón, a las hierbas, con cebolla y piñones, en ensalada, nuggets, especiado, bami goreng, consomé a la reina, etc.
Si nos dejamos los ingredientes que vayamos a utilizar, encima de la zona de trabajo, cocinaremos de una manera más rápida y eficiente.
Galimoneando |
Galimoneando |
Ingrs. para 4 personas:
- 800 grs. de pechugas de pollo enteras
- 2 cebollas
- 5 dientes de ajo
- un chorrito de brandy
- 1/2 vasito de vino blanco
- 1/2 cucharadita de orégano seco
- 1/2 cucharadita de tomillo seco
- un ramillete de perejil fresco
- 1 pastilla de caldo de pollo
- 1/2 vasito de agua
- 5 cucharadas de aceite de oliva virgen
- 1 cucharada colmada de harina
- sal y pimienta negra recién molida
Preparación:
Cortamos las pechugas en trozos regulares, salpimentamos, las espolvoreamos con la harina y removemos.
En una cazuela baja ponemos el aceite a calentar y salteamos las pechugas a fuego vivo dándoles la vuelta para que sellen por todos lados, las sacamos a un plato y reservamos.
En ese aceite ponemos a pochar la cebolla cortada en juliana y los ajos laminados.
Cuando la cebolla esté transparente incorporamos el orégano, el tomillo, el perejil picado, la pastilla de caldo desmenuzada, el brandy, el vino blanco y el agua.
Añadimos el pollo y dejamos que cueza todo a fuego lento durante 20 minutos.
Podemos servir el plato acompañado con arroz basmati.
Y a disfrutar galimoneando mis tiernas y melosas pechugas de pollo con salsa de cebolla.
Galimoneando |
No hay comentarios:
Publicar un comentario