Es un plato muy sabroso, fácil y rápido de preparar.
La alcachofa tiene muchas propiedades, es rica en hidratos de carbono y fibra, además es perfecta para dietas de adelgazamiento; bueno, si suprimimos la longaniza en la receta, naturalmente.
Si nos dejamos los ingredientes que vayamos a utilizar, encima de la zona de trabajo, cocinaremos de una manera más rápida y eficiente.
- 10 alcachofas medianas (cerradas y prietas)
- unas 7 longanizas frescas y con piel
- 1 cebolla mediana
- 2 dientes de ajo
- 100 grs. de tomate natural triturado
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 5 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharadita de sal
- 1 pellizco de pimienta negra recién molida
- unas ramas de perejil fresco
- 100 ml. de vino blanco (opcional)
- agua
Limpiamos las alcachofas pelando primero el tallo y después quitando las hojas externas, hasta que veamos las hojas más tiernas y rápidamente las sumergimos en el agua con perejil.
En una cazuela honda ponemos a calentar el aceite y sofreímos la cebolla picada y los ajos a rodajas. Cuando esté un poco dorada, añadimos las longanizas cortadas a trozos y rehogamos.
Cuando las longanizas cambien de color añadimos el pimentón, damos unas vueltas e incorporamos el tomate. Sofreímos un poco y en este momento si se desea, añadimos el vino blanco (opcional).
Añadimos las alcachofas escurridas y cortadas por la mitad. Damos unas vueltas y agregamos el agua, una rama de perejil y la sal.
Cocemos unos 30 minutos a fuego medio y servimos.
Galimoneando |
Galimoneando |
Ingrs. para 4-5 raciones:
- 10 alcachofas medianas (cerradas y prietas)
- unas 7 longanizas frescas y con piel
- 1 cebolla mediana
- 2 dientes de ajo
- 100 grs. de tomate natural triturado
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 5 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharadita de sal
- 1 pellizco de pimienta negra recién molida
- unas ramas de perejil fresco
- 100 ml. de vino blanco (opcional)
- agua
Preparación:
Lo primero que tenemos que hacer es preparar un bol grande con abundante agua y unas ramas de perejil fresco en su interior; esto lo haremos para evitar que las alcachofas ennegrezcan al pelarlas.
Lo primero que tenemos que hacer es preparar un bol grande con abundante agua y unas ramas de perejil fresco en su interior; esto lo haremos para evitar que las alcachofas ennegrezcan al pelarlas.
Limpiamos las alcachofas pelando primero el tallo y después quitando las hojas externas, hasta que veamos las hojas más tiernas y rápidamente las sumergimos en el agua con perejil.
En una cazuela honda ponemos a calentar el aceite y sofreímos la cebolla picada y los ajos a rodajas. Cuando esté un poco dorada, añadimos las longanizas cortadas a trozos y rehogamos.
Cuando las longanizas cambien de color añadimos el pimentón, damos unas vueltas e incorporamos el tomate. Sofreímos un poco y en este momento si se desea, añadimos el vino blanco (opcional).
Añadimos las alcachofas escurridas y cortadas por la mitad. Damos unas vueltas y agregamos el agua, una rama de perejil y la sal.
Cocemos unos 30 minutos a fuego medio y servimos.
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